Los muebles eran elegantes y cómodos, con un toque clásico que me hizo sentir como en casa. Además, el hotel estaba muy bien adaptado para las personas mayores. Las escaleras eran amplias y fáciles de subir, y el ascensor estaba en perfecto estado de funcionamiento. había pasamanos en los pasillos y en el baño, lo cual me dio confianza y seguridad al moverme por el hotel.

Lo único que pediría para unas vacaciones aún mejores para las personas mayores sería un personal de recepción más atento y servicial. Aunque no puedo negar que el servicio en general fue aceptable, a veces sentí que los empleados no estaban lo suficientemente dispuestos a ayudar.

El personal fue servicial y eficiente, así que vuelvo fijo. Era un hotel estupendo con un internet gratis. La ubicación era bonita y encantadora, la Basílica del Sagrado Corazón estaba a poca distancia del hotel. Las habitaciones eran modernas y de buen tamaño con vistas agradables.

Me encantó la decoración del hotel Frederiksborg, especialmente en las áreas comunes. Los muebles elegantes y los detalles clásicos creaban un ambiente acogedor y sofisticado. Además, la accesibilidad para personas mayores fue excelente. Había rampas y ascensores estratégicamente ubicados, lo cual facilitó mi movilidad y me brindó tranquilidad durante mi estancia.

Solo pediría una mejor atención a las necesidades de las personas mayores. Aunque el personal fue amable y servicial, creo que podrían estar más atentos a las necesidades específicas de los huéspedes mayores.

Desayuno con un cruasán. Una atención al cliente excelente😀😀

Me encantó la decoración elegante y acogedora del hotel. Los espacios comunes estaban cuidadosamente diseñados y decorados con muebles cómodos, que me permitieron descansar después de un largo día explorando Bruselas. Además, la accesibilidad del hotel para personas mayores fue realmente destacable. Las escaleras estaban bien iluminadas y tenían pasamanos seguros, lo cual me brindó confianza al subir y bajar. Sin duda, es un lugar ideal para una estancia relajante y agradable.

Me hubiera gustado que el hotel ofreciera actividades recreativas o programas especiales enfocados en las necesidades de los adultos mayores. Sería estupendo contar con actividades como clases de yoga suave, paseos grupales o incluso una biblioteca tranquila donde los huéspedes mayores puedan relajarse y socializar.

Era un lugar muy limpio, el personal era muy amable y bueno, y me ha gustado un montón mi habitación excelente. Una comida deliciosa. Ubicación: el hotel estaba a pocos pasos del centro de la ciudad, de del bar/restaurante y de un parque. El distrito Windsor valía la pena visitarlo.

El hotel está ubicado en una zona tranquila y residencial, cercana al centro de la ciudad. Además, se encuentra junto a un precioso parque, lo cual ofrece unas vistas impresionantes desde algunas habitaciones. La limpieza es destacable, pues cambian las sábanas y toallas todos los días. También ofrecen la opción de desayuno por un precio razonable de 8,50€.

Aunque en general el hotel está bien, algunos huéspedes han mencionado que las paredes son muy finas y se puede escuchar el ruido de otras habitaciones.

Nos ha gustado este hotel, estaba ordenado y tenía una ubicación tranquila y un personal servicial y eficiente. Las habitaciones del hotel eran modernas y de buen tamaño, con un baño, música y duchas. El servicio aquí era excelente. Tenían un registro fácil. El bar era bueno y la comida que sirven está buena. Es estupendo, no tengo ninguna razón para quejarme, os recomiendo este fantástico lugar.

Relax en la tina del baño, camas cómodas, lugar seguro, cercano a parque hermoso y basílica imponente, restaurante lindo y comida deliciosa.

Todo fue perfecto.

Me han gustado sus habitaciones espaciosas y enormes y la comida bastante buena.

Ubicación: el hotel estaba muy, pero que muy cerca del transporte público, de una estación de metro, del centro de la ciudad.

Accesible al centro, cercano a la catedral, buhardilla cálida, recepcionista simpático, buenas vistas.

No hubo nada que no me gustase.

Era un lugar muy limpio, el personal era bueno, y me ha gustado mogollón mi habitación buena. La ubicación en una zona maravillosa y al lado de una panadería y una tienda era estupenda y muy agradable. Normalmente iba al Friterie Boubou a comer algo.

Una comida bistronómica rodeado de la impetuosidad del bullicioso bulevar, en un restaurante que combina la cocina francesa con un ambiente animado. La posibilidad de disfrutar de los cócteles clásicos más exquisitos mientras te relajas en un salón espacioso y típicamente escandinavo. El personal te hará sentir como en casa con su amabilidad y atención al detalle. Disfrutarás de una habitación espaciosa y luminosa con todas las comodidades que necesitas.

Dificultades con la tarjeta para abrir la habitación.

Me gustó mucho mi fin de semana en este hotel. Lo que más me impresionó fue la ubicación. Está cerca de una hermosa basílica y un gran parque, perfecto para pasear y relajarse. También es accesible al centro de la ciudad a través del metro, lo cual hizo que explorar Bruselas fuera muy fácil. Otra ventaja que disfruté fue el precio asequible. Me pareció que el hotel ofrecía una buena relación calidad-precio, especialmente en comparación con otros hoteles céntricos más caros. Sin duda volvería a hospedarme aquí en mi próxima visita a la ciudad.

Hubo algunas cosas que no me gustaron durante mi estadía. El ruido de la calle era bastante molesto y a veces dificultaba el descanso.

no tengo ninguna queja en absoluto, tuve una estancia agradable y volvería.